miércoles, 4 de noviembre de 2015

Base 17. Peana 28mm de escayola pigmentada



Otra nueva peana.



En esta ocasión, hecha con una escayola muy fina (realmente se usa como pigmento), mezclada con mezcla de pigmentos.



Después de tener las piezas pintas, se realiza una composición de cómo quedarán las minis sobre la peana, para ver como realizaremos la orografía del terreno.



Para hacer la mezcla, utilizaré un cuenco desechable y la paleta de pintor que ya he utilizado en muchas ocasiones.





Como he comentado, utilizare “blanco de escayola”, un producto que podemos encontrar en las tiendas de Bellas Artes, en bolsas de kilo, a precio de botecito de pigmento, sobre unos 4,- ó 5,- €. Este producto ya lo he usado en alguna ocasión y aunque se vende como pigmento, realmente es escayola muy fina.





Y, como no, el pigmento de color tierra. En esta ocasión utilizaré la mezcla que en su día ya realice (ver artículos anteriores), y que me servirá de color base para el terreno.





El agua para la mezcla, que no falte.





Y un poco de piedras, para dar un poco de “cuerpo” al terreno. Para ello utilizaré lo que el fabricante Nine denomina “Arena Gruesa”, y que no es otra cosa que pieles de piñones trituradas (si, piñones de piña, de los pinos españoles).





Lo primero que haremos es la masilla a base de escayola, mezclada con los pigmentos. La consistencia, para poder trabajar bien, tiene que quedar igual a la de la papilla para los bebés.





Si el maquetista quiere dar textura al terreno, este es el momento de mezclar en la masa creada, arena u otros elementos para conformar la textura.  En mi caso quiero hacer un terreno con poca rugosidad, poco texturado.

Con la masilla ya creada, se extiende por toda la pena.


 



Y, en mi caso, cuando la masilla está todavía tierna, añado las miniaturas y las integro entre la base y la masilla.


 




Y ya no podemos seguir trabajando, hasta que un par de días después está la base bien seca. Si realizamos los siguientes pasos con la escayola todavía húmeda, podemos estropear el trabajo y llevarnos material con las pinceladas.






Es en este momento en el que debemos añadir las piedras, antes de seguir con la fase de pintado.

Para oscurecer los recovecos, que son escasos, ya que mi intención era hacer una base con poca textura, añadiré Wash oscuro (Transparent Acrylic Wash 73300, bote de 200 ml), por toda la peana.





Al ser muy lisa la peana, el Wash buscará los recovecos y las uniones con las piedras, para asentarse, ofreciendo unos matices muy curiosos con el lavado.


 



Ahora le toca el turno a la pintura.

Como ya es propio de mi, utilizare una gran cantidad de colores, ya que encanta darle matices, muchos matices, a los terrenos.

Para ello utilizaremos más de tres colores, para dar riqueza de matices y que el terreno no quede rojizo.





Comentario 1: Personalmente opino que utilizar arenas y tierras directamente sobre la peana, sin pintarla anteriormente ni darle un color creíble después (pintar la peana con la tierra ya colocada), da una sensación de color falseado y de pobreza cromática, que no veremos nunca en la realidad.

Comentario 2: Hay que recordar el efecto escala, mediante el cual un color que en la realidad es uno determinado, al usar el mismo en una miniatura da el efecto de ser más oscuro y se pierden toda la sensación de profundad y textura. Esto es debido a la refracción de la luz sobre el material… bueno algo que se debe leer, porque yo no tengo tiempo de explicar, pero que está bien explicado en el catálogo de producto de AK-Interactive. Y es por ello que se debe incrementar todo ello, por medio de pintar encima del terreno.

Como ya tengo el color base, y he oscurecido las depresiones y huecos con el Wash, ahora solo resta darle el policromatismo. Para ello el primer color que usaré es el Amarillo Camuflaje (Model Color 978).





Aplicaré con un pincel semi seco, pero no demasiado cargado de pintura, a toda la superficie, dando una sensación de verde barro muy convincente.





Sigo con otro pincel semiseco de marrón Verde (Model Color 879), pero igual que el anterior, con poca pintura en el pincel.





Es un tono amarillo verdoso más claro que el anterior, reforzando ese efecto de terreno entre húmedo y seco.





Acabamos con los tonos verdosos, y pasamos a los marrones, con  un Arena Marrón (Model Color 876).





Y posteriormente con un Ocre Verde (Model Color 914).





Ambos son aplicados uno detrás del otro, en pincel semi seco, igual de cargado que los anteriores. Al aplicar estos colores, un marrón claro y un beige, se abandona la sensación de terreno húmedo, para afianzar otro tono de terreno más seco.





De momento la sensación visual es rara, mas teniendo en cuenta que la masilla se ha aplicado con poca o casi nula textura, por lo que el efecto de barro seco, pero no resquebrajado, va dando sus frutos.

Ahora cambiamos de tipo de pintura. El motivo no es porque esta pintura sea mejor o peor que las aplicadas anteriormente, sino que es el tono que deseo aplicar ahora, el Ocre Amarillo. En este caso en tubo y del fabricante Titan. Por cierto, aunque en tubo, no es oleo, sino acrílica.





Hasta aquí hemos conformado el color del terreno. Ahora le toca el dar las luces.

Por ello el primer pincel seco que aplico al terreno, es el ya típico en mi, el color Carne Mate (Model Color 955).





Mientras que con los colores aplicados con pincel semiseco he tenido mucho cuidado de no pintar las piedras,  ahora, una vez aplicado el pincel seco sobre el terreno, cuando casi ya no mancha nada, también le daré a las piedras, para dar un toque de iluminación.





Ahora le daremos la luz intermedia, también con pincel seco, de color Amarillo Caqui (Model Color 976).





Esto le confiere más iluminación. Como se ve en la foto, los tonos de luces se aprecian poco ya que al terreno tiene poca rugosidad y textura. Si deseamos que el contraste sea muy fuerte, recordar de añadir arena fina a la mezcla de la masilla, cuando la estamos creando.





Y la última iluminación, la más clara, con Blanco Hueso (Game Color 034).





El motivo de aplicar pincel seco con blanco hueso es muy simple: el terreno es demasiado liso, por lo que la iluminación deberá ser muy intensa.





Aparentemente queda rara la base, si miramos de forma rápida parece que no tenga muchos matices. Pero no me preocupa ni lo más mínimo, ya que ahora le toca el turno a la vegetación, que realmente será lo que llamará a la mirada del espectador.

Para aplicar la vegetación, toda ella del tipo ferroviario, como hasta ahora he ido explicando en todos los trabajos que hago,  usare de nuevo la cola para escenografía de Woodlan Scenic “Scenic Cement”





Esta colla la aplicaremos en zonas, no en toda la base, para evitar el abigarramiento  monocromático que llenaría toda la peana. A mí me gusta jugar con claros y densos por igual, así como multitud de tonalidades, para intentar dar una sensación de realismo a la vegetación de la peana.

Una vez colocada la cola, pondremos el polvo de flock que ya he usado en muchas de las peanas de los últimos trabajos.





En este caso y como la dotación del mortero se moverá mucho alrededor del mismo, dejare un gran claro en el centro y un lado de la pena.





Después de aplicar este verde pradera en polvo de flock, le toca el turno a la hierba electroestática de 1,5mm. Para ello utilizo la más recurrida por la mayoría de maquetistas, la “Verde Quemada”, que es de tres tonos (verde, amarillo y rojo).





Al ser muy cortito este sintético, le damos un poco, muy poco, más de volumen a la peana, pero  lo importante es que rompa la monotonía del color verde inicial.





Como quiero darle un poco de vida a la peana, no sólo de verde vive el campo, sino que también podemos encontrar hierbas secas todo el año. Por ello coloco hierva color paja.





Esta hierva la podemos encontrar sólo de color amarillo y de tamaños diferentes, tanto de 1, 1’5, 3 y 6mm. En su día adquirí hierba electroestática amarilla de 1,5mm y de 3 mm. También lo que en ferroviario se llama color Marrón Hierba Seca de 1mm. Yo he juntado las 3 en una única mezcla y la uso siempre que quiero darle esa “vida” al terreno.





Y ahora le toca el turno a la hierba de 6mm de color verde primavera (si lo sé, los nombres son muy… curiosos, pero ofrece una idea rápida del tono que es).






¿Cómo aplicamos toda la hierba electroestática en las peanas?

Ya comenté que yo no utilizo ni inventos raros ni elaborados para conseguir que la hierba esté vertical. También dije que excepto el césped de un campo de futbol, de un campo de golf o del jardín de la tía Jacinta: toda la hierba igualada tanto en dirección y altura, y perfectamente cortada.

¡¡NO, me niego a hacer eso!!

Es mi forma de concebir la viñeta, peana o diorama. No es obligado que le guste a todo el mundo, ya que hay quien le encanta el terreno sin plantas, y otros, como si fuese un retazo de bosque lleno de vida y plantas, sin resquicio alguno de verse algo de terreno.


Explicaré como lo he hecho con cada uno de los tres tipos de hierba, paso a paso con esta última.

Primero colocaré la cola de Woodland con un pincel. Realmente lo que hago es mojar el pincel en exceso de cola, y por medio de goteo, la cola moje zonas de forma irregular.





Cuando todavía está mojada, empapada, la zona de cola, cojo entre  los dodos la hierba electroestática y la esparzo como si fuese condimento de comida, moviendo los dedos entre si.





Al hacer este movimiento de dedos se consigue que la hierba que soltamos caiga en su mayoría en posición más o menos vertical. Lo de más o menos es porque no caen todos en la misma dirección. Tenemos que echar mucha cantidad de hierba para que el efecto que se quiere conseguir tenga resultado. Hay que ser alegre y generoso en su utilización.





Transcurridos un par de minutos, podemos eliminar el sobrante, por medio de colocar boca abajo la pena y practicarle golpecitos suaves y secos por debajo. Con ello eliminamos toda la hierba que no está enganchada a la peana.

Comentario 3: ¡¡OJO!! No soplar nunca para eliminar el exceso, ya que conseguiríamos que se eliminase más de la cuenta y que cogiese la mayoría de hebras la dirección del soplido. Y si esperamos a que se seque la cola, por mucho que soplemos o le demos golpecitos, tendremos un montón de hebras de electroestática mal puestas, y la mayoría en horizontal. Mmmm aunque para según que efecto esto puede ser interesante…





El sobrante podemos guardarlo nuevamente en el bote/bolsa donde tenemos el resto de electroestática.





Y el resultado, visto de cerca es este.





Terminado el trabajo de la peana, podemos ver que el conjunto luce de esta forma.


 
 


Saludos.

Salva Rosselló

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