En el anterior artículo se dejó justo en el momento de iniciar el montaje de la fachada principal del Templo. Pues bien, es el momento de iniciar la construcción de esa fachada.
Lo primero que se deb realizar es el arco de la entrada principal. Para ello lo primero es juntar todas las piezas para saber como se podrá montar, ya que no es un arco plano sencillo, sino doble.
Una vez determinada la forma final del arco, se monta en dos partes, la derecha y la izquierda, teniendo sumo cuidado en hacer las dos partes exactamente iguales, para que no exista ningún desfase en el montaje final. Tambien se debe ter muy en cuenta que debe estar totalmente nivelado y que no existan inclinaciones diferentes a 90º.
Una vez realizada el saliente de la entrada principal, se crea el resto de la fachada, poniendo especial cuidado en ir creando todo de forma doble, para crear el lado derecho y el izquierdo simultáneamente y de forma simétrica.
Una vez creadas las piezas idénticas, sólo queda unirlas a la fechada principal y continuar con él.
Una vez lleguemos a la parte alta del muro, se tuvo que decidir la parte que debía estar rota por la explosión (si, es un templo derruido por 1 única explosión… ya lo veréis). Al ser las piezas de escayola, lo bueno que tiene es que con unas tenazas para “romper” las piezas y un simple punzón para “grabar” la rotura, es más que suficiente.
Una vez tenemos la fachada principal casi totalmente terminada, a falta de posibles nuevos elementos finales, según lo que podamos encontrar en último momento, se empieza a levantar el lateral derecho del edificio, con sus cornisas y resto de detalles.
.Salva Rosselló
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