Una vez colocado el material escenográfico General, se pasa a añadir ciertos detalles. Por ejemplo, se pueden utilizar alambres y material plástico de Evergreen, de los utilizados para maquetas de arquitectura, para imitar trozos de vigas retorcidas por el suelo y para imitar el encofrado armado del hormigón de las columnas.
Lo primero que aremos es usar el portabrocas manual para realizar los taladros en las columnas e insertar las varillas de refuerzo.
Se realizan taladros en las columnas de las esquinas de los edificios y se van insertando el alambre, doblándolas en todas las direcciones.
Una vez tenemos las columnas de una forma un poco más creíble, se pasa a ir colocando trozos de vigas (no muchas) esparcidas por la superficie.
Como se observa en está última foto, una de las vigas se la ha deformado, para parecer que ha recibido un fuerte impacto con calor y la ha doblado por todas partes.Este efecto se consigue calentando la pieza con una llama.
(Perdón por la calidad de la foto, pero calentar el plástico, no quemarte los dedos, que no se funda el plástico y hacer la foto a la vez, es un pelín complicado).
Y los resultados son estos.
Una vez terminado de añadir elementos “anclados” a la escenografía, así como los cascotes más grandes de toda la ruina, pasamos a dar una última capa de tierras, pero esta vez mezcla entre la más fina del suelo y la gris oscura ya colocada con anterioridad.
Se pone generosamente cola por entre las ranuras más grandes que se puedan ver y sobre elementos como piedras grandes, enlace entre grupos de diversos tamaños (que de momento parecen demasiado “puesto adrede”), sobre los las uniones de los edificios con el suelo, no en todas, y en especial algo en los pisos, que previamente sólo se había colocado piedras de un único tamaño.
Una vez encolado generosamente, se procede a cubrir todo de esta mezcla, también de forma generosa, para que no quede ningún resquicio sin introducirse. Para que se pueda colar toda esta mezcla por donde hemos colocado cola, se “agita” la pieza para que esta tierra se vaya asentando en dichos resquicios.
Si lo que estuviésemos haciendo fuese un diorama para presentarlo en un concurso, en el colocaríamos una serie de figuras ocultándose, corriendo o disparando, la cantidad de cola sería tremendamente exagerada, ya que el resultado final tendría que ser el que se ve en esta foto, ya que esto es muy, muy, muy aproximado a la realidad.
Pero como lo que tenemos que hacer es una escenografía jugable en la que tendremos que colocar figuritas con una peana mínimo de 30mm de diámetro, e incluso superior (40mm, y 60mm), debemos “eliminar” todo el exceso de terreno que no nos permitirá colocar bien dichas peanas.
En este momento ya tenemos terminada básicamente la escenografía. Será interesante ver una imagen de cómo estaba cuando lo hemos retomando para rehacerlo.
De momento se ve una diferencia, ya que ahora sí que se ve el efecto caos de toda ruina, que antes no se veía por ningún lado.Ahora bien, como tengo algo más de tiempo y no nos urge esta pieza para un torneo en breve, me voy a permitir añadir ciertos elementos escénicos, para personalizarla para un combate urbano. Pero eso lo haré en la siguiente entrega.
Salva Rosselló
La verdad es que se hacen maravillas con 4 piedrecitas y trozos de madera... bueno, y la habilidad y conocimientos necesarios, claro.
ResponderEliminarAhora que la verdad es que la escenografía con tantos elementos adicionales hace desmerecer bastante la calidad de las piezas de Games Workshop.