Este trabajo
es compartido con mi pareja Marie Jo, ya que es un encargo de una conocida de
ella para crear una pequeña viñeta.
Lo primero
que se ha hecho es sobre un CD usado y ya no aprovechable.
Sobre ella y cubriendo un poco más de la mita (realemnte para cubrir el agujero del CD), se engancha un trozo de lija de color negro, con el grano adecuado. Esta se pinta en pincel seco con varios tonos de grises. Ojo, el/los pinceles que se utilicen para el pincel seco sobre lija, esta se come el pelo del pincel a velocidades exageradas, y una vez terminado, sólo queda el mango. Para tirar. Por eso, este tipo de trabajo, usar pinceles sintéticos o similar, de ls que podemos encontrar en tiendas de suministros asiáticos, a 2,- € la bolsa de 10 ó 12 pinceles.
La línea blanca
se consigue enmascarando con simple cinta de carrocero alrededor de donde se
quiere pintar la línea.
Después se
añade la tierra y se pinta con los tonos adecuados, como ya os he indicado en
más de un artículo.
Finalmente,
se añade hierva electroestática, un arbusto creado con serrín tintado sobre
musgo noruego (ver http://pincelymasilla.blogspot.com.es/2015/05/base-10-arbustos.html),
y elementos escénicos de Mini Natur, en este caso hiervas con florecillas
blancas y amarillas. Esto último es para dar un pinto de color al conjunto.
Como esta
viñeta va a ir destinada a un motero, he optado por darle algo de “dramatismo”
y he querido colocar el poste indicativo de que es la carretera “Route 66”, la
carretera interestatal norteamericana, que va desde los grandes lagos, hasta
Los Ángeles, y es una de las favoritas de los moteros USA.
Para ello he
buscado por internet una chapa con personalidad indicadora de dicha carretera.
Hay muchas, en especial las que comercializan fabricantes avispados, para
turistas desconocedores del tema. Pero he encontrado unas cuantas fotos de
chapas originales, y esta es la que más me ha gustado para el diorama.
Impresa al
tamaño adecuada, se monta en una varilla y esta se pinta de metal.
Este se
coloca en la base, en un lado del terreno.
Ahora nos
toca la moto. Realmente es un juguete de niño, que como tiene un cierto valor
sentimental, nos lo dieron “en piezas”. Lo primero es reparar la moto, montar
las piezas sueltas entregadas y reparar rotas que traía. Como el faro es una de
las piezas desaparecidas en combate, he optado por poner una calavera con
huesos cruzados, proveniente de mi cajón de sastre de wargames. Muy
posiblemente sea de orcos o goblins de GW.
Después de
varios intentos de dar un color cromo al frontal de la moto a pincel sin
conseguirlo, utilizo la pintura acrílica Cromo de Vallejo de la nueva gama
Metal Color, que me da un acabado a pincel más que aceptable.
El motivo de
hacerlo a pincel es que no tengo posibilidad de desmontar la pieza a pintar ni
de enmascarar la moto. Aunque es un juguete, tiene muchas piezas delicadas y
pequeñas que se rompen con mucha facilidad, por lo que no puedo enmascarar como
me gustaría, para aplicar el color metal con aerógrafo.
Ahora le
toca el turno a los toques finales. Y para ello usaré lavado de Game Color color
Sombra y Pigmento Siena Claro, también de Vallejo.
El lavado lo
diluyo bastante, ya que deseo que sólo penetre el pigmento en los detalles del
motor.
El pigmento
básicamente es para ensuciar las ruedas, para que no queden tan “plástico” y
para darle un ligero toque de polvo al frontal y bajos.
Y el
resultado final es el siguiente.
Saludos.
Marie Jo y Salva
Rosselló
No hay comentarios:
Publicar un comentario