Ha llegado la Navidad.
Y con ella, la fira de Santa
Llúcia en Barcelona, como cada año, un hito a no faltar por la mayoría de
maquetistas, y por la gran mayoría de belenistas.
En ella se pueden encontrar
piezas CARISIMAS para nuestros belenes, pero que para los que no tienen
habilidad en las manos y les encanta hacer belenes algo más trabajado que el
que se puede comprar a piezas en las tiendas asiáticas, o papelerías de barrio,
es de obligado cumplimiento el pasar a comprar alguna pieza. La tradición
Barcelonesa dice que cada año debes, como mínimo, comprar una pieza para tu
Belén. Cosas de las supersticiones, ya que si no, dicen, que no te irá bien la
economía el año siguiente.
Hoy me he dirigido con mi esposa
a la catedral, como cada año (para mi no es un ritual, es recordar la ilusión
que tenía de pequeño por poder ver miniaturismo, que siempre me ha llamado y
mucho), que es uno de los puntos donde la feria se ubica cada año, y es el
lugar que más tiempo lleva y que más tradición y solera tiene. Y para variar
estaba a tope. No se puede pasar tranquilo, se pierden muchas fotos por los
empujones que te dan al momento de fotografiar, la gente con niños que van con
cochecitos se creen con el privilegio de tener prioridad en todo por llevar el
niño en coche,… ¿Alguien podría decirles que llevar niños en cochecito es
sumamente peligroso, tanto para las otras personas que van atropellando como
para sus retoños? Si atropellas a alguien, este puede perfectamente caerse
sobre el niño y hacerle mucho daño, como pasa año pasa una vez, como mínimo.
Pero hay gente que sigue creyéndose con este privilegio…
Esta fira tiene ya muchos años
de antigüedad. No es como algunos dicen que apareció sobre los años 50. NO. Se
constatá que, como poco, es de 1786, porque hay referencia ecrita, pero
podría ser mucho anterior. La referencia sobre ese año es constatado por Rafael
Amat, escritor catalán del siglo XVIII (1746-1818), conocido con el sobrenombre
de Barón de Maldá, y donde en una crónica de su dietario de 60 volúmenes
titulado “Calaix de Sastre” se dice : “Día 13 de Diciembre, Santa Lucía virgen
y mártir. Hubo fiesta en la Catedral, en la capilla y en el altar donde se
venera la imagen de la Virgen; y fuera, en los claustros, con la feria delante
de su calle, muchos puestos de belenes, figuras de barro y cartón, imágenes de
santos, pastores, animales..., que hacen que haya multitud de gente…”.
Fira de
Santa Llúcia, 1945 (Imagen: http://www.artesaniabertran.com/historia)
Fira de
Santa Llúcia, 1970, cuando yo era chiquitín y como empiezo a recordarla (Imagen:
www.lavanguardia.com/reportajes-fotograficos).
Pero vayamos a lo que vamos.
Esta feria puede ser un perfecto
espejo de lo que está reclamando en belenes. Aunque este año, aparte de una
curiosidad, que después comentaré, no hay excesivas novedades ni sorpresas. Lo
que si que es cierto es que los buenos belenistas que publican fotos de sus
trabajos en internet, bien en foros como en sus correspondientes blogs, son los
que marcan la tendencia de cada año, y este no va a ser menos.
Los portales tradicionales, los
que están hechos a modo de cueva, con cuatro trozos de corcho natural, siguen
siendo lo más clásico y lo que la gente más demanda. Y por dos únicos motivos:
por el precio, ya que por el tamaño que buscamos su precio es 3 y 4 partes más
barato que el que nos gustaría tener, y porque hay quien opina que si no es un
portal de cuatro trozos de corcho no es queda el belén como debe ser (creencias
de cuando fueron pequeños, supongo, que ha pasado de generación en generación).
Aunque nacimientos más trabajados, aunque pocos, también se podían ver, En especial los denominados “del país”.
Y ahora empiezan a aparecer lo que últimamente se puede ir viendo por internet, pero con acabados más bien de jugador de Wargames de de fantasía o de 2GM, pero sin mayores aspiraciones que representar de forma sencilla la viñeta. Y las casas en ruinas están muy a la orden del día. Es lo que pide la gente sobre los 30 años.
Aquí, un portal un tanto curioso. Para los que quieren tener mucho en poco espacio: cueva, montaña y pueblo, todo en uno.
Y ahora, la nueva moda. El año
pasado empezamos a ver algunas construcciones, tanto portales como otras
edificaciones, de este estilo (ver http://pincelymasilla.blogspot.com.es/2013/12/epoca-de-belenes.html),
en el que el artesano ha ido enganchando piedra a piedra, para dar un relieve y
una profundad a las paredes, como si de un Lego se tratase. Pero este año, en
su gran mayoría (por no decir todas) con menos fortuna que acierto. Es la forma
de hacer belenes por los belenistas que viven de montarlos para particulares o
ayuntamientos.
Este tipo de construcciones
podemos encontrarlas prácticamente en todos los tenderetes. Aunque este estilo
lo encuentro muy atrayente y especialmente perfecto y bonito para elementos
escénicos de los belenes, tanto para portales, como anunciaciones, edificios,
ruinas,…, aunque en esta ocasión debo decir que el estilo “improvisado” que he
podido ver en las construcciones de hoy, personalmente no me gusta ninguna de
las que habían para vender, pero mejor que juzguéis cada uno de vosotros, ya
que como ciertos miniaturistas que hacen este tipo de trabajo, que podemos ver con
bastante asiduidad últimamente en FB, y suelen decir que “a gustos, colores”,
cuando les comentas en que pueden mejorar su trabajo.
Pero no sólo había nuevas tendencias y excesivas tradiciones, sino que podíamos encontrar un poco de todo, a gusto y precios para todos.
Y las construcciones de grandes pueblos, , como cada año, para los fondos de los belenes de la gente de bolsillo más amplio, con muy buenos acabados y difícil mejora de su factura.
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